LOS HOTELES MÁS BONITOS DEL MUNDO PARA MONTAR A CABALLO
Desde la reserva natural de la Camarga hasta las playas de la isla de Sumba, pasando por el palmeral de Marrakech, un resumen de los hoteles boutique que han hecho del mundo ecuestre su gran afición.
POR JADE SIMÓN
21 de enero de 2025
Un proverbio árabe dice que “el aire del paraíso es el que sopla entre las orejas de un caballo”. Una visión fantaseada que no ha escapado a un puñado de hoteleros de todo el mundo. Que, más que convocar a los caballos para dar un paseo, los colocó en el corazón del ADN de sus direcciones.
Los caballos salvajes del hotel Nihi Sumba en Indonesia
NIHI Sumba Jason Chids
Pionero de su género, el NIHI Sumba fue el primero, en 2001, en ofrecer la posibilidad de aprender sobre los beneficios de la equiterapia en un entorno paradisíaco. En la isla indonesia de Sumba, cada mañana, tan pronto como sale el sol, una caballería de 17 Sandalwoods (raza local) abandona el establo hacia la playa. Al pie del complejo, pasean, galopan o se bañan en el Océano Índico con total libertad. Como recién desembarcados del arca de Noé, estos bayas marrones conviven con los visitantes. Mejor aún, son el elemento clave de los retiros para mejorar su bienestar físico y mental. La oportunidad de conocerse mejor, sentir las energías, determinar sus límites o abrazar sus emociones frente a un animal salvaje sin malicia.
Para descubrir aquí
La Camarga, tierra prometida equina
Les Bains Gardians en la Camarga Matthieu Salvaing
En Francia, el nuevo hotel Les Bains Gardians , inaugurado este verano, garantiza la reconexión con un arte de vivir a la antigua usanza, en contacto con la hermosa naturaleza virgen. En medio de una reserva natural de Camarga, los viajeros se sumergen en el mundo de los gauchos, vagando entre arrozales, rodeados de flamencos rosados y toros o en las olas del Mediterráneo.
Para descubrir aquí
El Selman, bastión de pura raza árabe en Marrakech
Un caballo en los establos del hotel Selman en Marrakech, dibujado por Jacques García Reto Guntli
Un safari a caballo en Namibia
Compañero ancestral, el caballo resulta también el perfecto intermediario entre el hombre y el mundo salvaje. Es rico en esta idea que Kambaku Safari Lodge organice safaris ecuestres en Namibia. Durante cuatro días, los jinetes se sumergen en el monte. Lejos del ronroneo de los jeeps, se mueven en un silencio dorado, ganando velocidad para admirar las manadas de cebras o reduciendo la velocidad para acercarse a las familias de jirafas errantes. Cómplices de tantas andanzas enriquecedoras, nos recuerdan en última instancia que nunca somos tan felices como conectarnos con el mundo real, con la nariz al viento.
Para descubrir aquí
Kambaku Safari Lodge